Con todo el equipo preparado y con muchas de ganas de aprender, partimos hacia nuestra localización nocturna. Antes de comenzar, un pequeño repaso del procedimiento de trabajo en la noche permitió a los componentes del grupo refrescar las ideas y ponerse manos a la obra.
Entre las localizaciones, un antiguo palomar, una vieja finca abandonada y unos fotogénicos árboles y palmeras que se prestaron a nuestras pruebas fotográficas con flashes, linternas, luces con geles de colores,...
Tras una sesión donde disfrutamos de una temperatura muy agradable (a pesar de las rachas de viento), nuestro amigo Juanma nos sorprendió con un improvisado "pic-nic nocturno" para recuperar fuerzas.
A todos agradeceros vuestro interés mostrado y ganas de aprender.
Preparando los equipos para la sesión
Árbol
Caserío
Palomar
El grupo de intrépidos noctámbulos
